Kilómetros y más kilómetros pasaditos por agua. Teníamos prevista una parada en Rovinj, pero la procesión de coches alrededor del casco urbano intentando aparcar hizo que después de 1 hora desistiéramos. Eso sí, buscamos un punto estratégico desde donde poder sacar un par de fotos para nuestros seguidores del blog.
Seguimos la ruta y cuando apretó el hambre paramos en un pueblecito en medio de la montaña. Al ojear la carta comprobamos como hemos pasado de los calamares al ciervo y de las gambas al bacon casero. Pedimos el plato estrella, en teoría para dos personas, y nos traen una bandeja llena de grasas super poli saturadas camufladas dentro de salchichas, tocino, carnes de caza…
Nuestra última tarea fue encontrar Villa Magdalena, un aparthotel spa con aguas termales, dónde podremos disfrutar de nuestro propio yakuzzi. Realmente un lujo de habitación a un precio más que razonable: 120 € / noche (2 personas).
Vaya festín gastronómico, pero no os preocupéis, que las grasas poliinsaturadas son muy diuréticas y limpian por dentro.
ResponderEliminarFelicidades por el SPA, que ya tocaba un poco de relax.
kiss
aemidius
Ualaaa!! Qué pasada de habitación :O
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