El parque nacional de Krka es nuestro destino para esta jornada. Nos desplazamos en coche a la ciudad de Scradin para coger el barco que nos llevará al parque. Quien se quiera ahorrar unas cuantas kunas deberá evitar a los gorrillas de los primeros aparcamientos y dejarlo en el parking que hay pasada la localidad. Además de estar más cerca del embarcadero, sólo cuesta 30 kunas / día, en vez de las 7 kunas / hora de los primeros.
Navegamos durante unos 30 minutos por un sumidero rodeado de juncos y con algunos cisnes salvajes. Nada más desembarcar nos encontramos con unas hermosas vistas: las cataratas de Skradinski Buck, un lugar en el que te puedes bañar pero eso sí, rodeado de muchos turistas.
Un camino de madera te permite disfrutar de la naturaleza del parque adentrándose en su interior de una forma poco intrusiva. Rodea las cataratas en aproximadamente 1 hora aunque a nosotros nos llevó casi 4: el trayecto incluyó nuestro particular picnic al más puro estilo Paco Martínez Soria, siesta incluida.
Y como Jose no se dormía, Belén aplicó su sabiduría de madre, pero con su marido.
Posteriormente intentamos coger unos barcos que navegan la parte superior de los lagos en dos trayectos posibles, pero nos informan que para el día de hoy estaba todo vendido. Decidimos entonces aventurarnos con el coche. Pero antes de irnos, comprobamos que en todos los países hay un Sandokán, y el de Croacia estaba en Krka.
Pasamos por algunas carreteras algo perdidas, en ocasiones con un único carril para los dos sentidos y con la dificultad añadida de que la noche empezaba a caer. Primero llegamos a Roski Slap, donde hay algunos molinos y un lago enorme con tranquilas aguas.
Después vamos hacia Visovac. Esta segunda ubicación no nos regaló unas buenas vistas, quizás porque no elegimos el punto correcto, quizás porque la luz que quedaba ya era mínima.
Entradas al parque nacional, 4 x 95 kunas; pan y embutido para el picnic, unas 100 kunas; saltar en lo que parece el fin del mundo, no tiene precio.
Me encantan las cascadas, parecen las de los cuadros de los restaurantes chinos.
ResponderEliminarY ole en Picnic, Hacendado forever!!!
Kiss